Nuestra Pascua de Resurrección

Bueno, esta fecha ya es más comercial que espiritual, no recuerdo en mi niñez que se celebrara con conejitos y huevitos, o por lo menos mi familia no lo hacía, recuerdo que comencé a conocer estos ricos chocolates (me encantan!!) cuando nació mi hermana menor, a ella si le escondíamos huevitos, por lo que los recuerdos que tengo de esta tradición son de mi adolescencia ya que con la Pía nos llevamos por 15 años.

Con el correr de los años esta fecha ya se ha hecho bastante popular y el resultado ha sido beneficioso para las empresas que se dedican a este rubro del lácteo, yo creo que en la mayoría de los hogares hoy tiene más de un huevito de chocolate en su despensa.

Este año decidí que este día fuera distinto, primero que todo le conté el porque se celebra esta fecha ( en su jardín tambien le contaron la historia a traves de un cuento), la verdad es que no sé si le habrá quedado en su memoria que Jesús resucito al tercer día y que por eso este día es tan especial para el mundo cristiano y que una forma de respresentarlo es dejar huevitos que significan el renacer de la vida, para un niño de tres años lo más importante son las golosinas y él estaba expectante de si el conejito lo visitaría y le dejaría algo por ahí. Para amenizar nuestro jardín, decidí realizar cositas manuales (no fueron muchas pero me gustó el haberlo hecho) por lo que hice unas orejitas de conejitos con fieltro para cada uno, y otras cosillas para decorar nuestro jardín.

El día Domingo nos colocamos los tres nuestras orejitas y fuimos en busca del tesoro de chocolate, para simular que el conejito anduvo por nuestro jardín le dibuje unas huellas y las pegue en las baldosas, Agustín preguntaba: ¿Mamá, cómo llegó hasta acá el conejo? ¿como dejó sus huellas? ¿ las pusiste tú? (parece que no me quedaron muy convincentes ja ja ja), pero dentro de todo el resultado fue el esperado, Agustín buscaba entre las plantas sus huevitos, por lo que quedó muy contento con la visita, disfruto de este día, y nosotros tendremos otro lindo recuerdo familiar para dejar en nuestro albúm de fotos.

La Elección del Colegio

Agustín ya va en Medio Mayor en su jardín por lo que el próximo año ya le corresponde ingresar al Pre-Kinder, y la verdad es que estoy en la duda si postularlo este año a un colegio o que siga en su querido jardín. El problema es que si decidimos que vaya a un colegio debemos postularlo el próximo mes, por lo que mucho tiempo no tenemos para tomar la decisión.

Debo confesar que este tema lo vengo analizando desde que mi hijo tiene 2 años, si, algunos me dijeron exagerada que como tan antes pensaba en esas cosas, pero la verdad es que de algo sirvió, ya que me pude informar de hartas cosas para tenerlas en cuenta a la hora de elegir, y a la larga ya estoy aquí pensando donde estudiará, más que mal, es una de las cosas más valiosas que le podemos entregar a nuestros niños, la Educación.

Bueno uno de los colegios que tenía en mente queda descartado hasta varios años más, este colegio queda en otra comuna muy lejos de donde nosotros vivimos y no quiero que el niño pase horas y horas sentado en un auto o en un furgón escolar, ya tuvimos una mala experiencia cuando lo trajimos a la sala cuna que hay en nuestro trabajo, fue muy traumático tanto para nosotros como para Agustín, el prácticamente salía a trabajar con nosotros, se levantaba muy temprano y andaba en auto aproximadamente 45 minutos hasta llegar a nuestro trabajo (si es que no nos encontrábamos con tacos) y de ahí lo llevábamos a un bus donde lo transportaban como por 15 minutos más, el regreso era lo mismo, pero él ya iba agotado, cansado, estresado, sólo pedía llegar a casa, lloraba todo el camino, bueno aparte se nos enfermó demasiado por lo que decidimos sacarlo y colocarlo sólo media jornada en un jardín cerca de nuestra casa, por lo que por ningún motivo quiero que vuelva a pasar por eso nuevamente, está muy pequeño.

Ahora tenemos tres o cuatro alternativas, algunos me dicen que es mejor que siga en su jardín que los estresaremos muy pronto por el nivel de exigencia, y ya estaba convencida de que continuara en el jardín, del cual sólo tenemos muy buenas y lindas experiencias, su jardín es un 7.0, las tías lo quieren mucho, tiene hartos amiguitos y a él por supuesto que le encanta, pero otros me dicen que lo mejor es que ingrese el próximo año directo al colegio, por lo que estoy muy confundida, bueno mi marido tiene un colegio favorito, el cual tiene buenas instalaciones, tiene excelencia académica en la comuna y aparte muchas actividades extra escolares, cosa que queremos que él tenga. Las Postulaciones son el 2 de Mayo por lo que tenemos sólo dos semanas para ver que hacemos, yo presentía que este tema sería estresante, pero la verdad es que a ratos me supera.

Otro Día de Hombres

Como siempre he dicho en este espacio, mi hijo y su Papá son amigos del alma y ayer mi marido decidió tener una salida especial con Agustín, lo llevaría por primera vez al estadio a ver a nuestro Equipo favorito Colo-Colo, los acompaño mi Papá, y me hizo recordar que cuando éramos niñas con mi hermana, él cada vez que podía nos llevaba al Estadio Nacional al ver a su equipo de sus amores, de ahí nuestro gusto por el equipo popular (mi marido también es hincha pero su corazón está dividido con su equipo del Norte, los Pumitas de Antofagasta) yo no entendía nada de futbol pero me encantaba hacer ese tipo de salidas, él nos compraba dulces, maní, bebidas y era repoco lo que mirábamos del partido, más nos entreteníamos jugando en los asientos, disfrutando de las golosinas, viendo a la gente pasar, los vendedores de café, era una cosa que me llamaba mucho la atención, con esas tremendas cajas de lata en donde los transportaban, son lindos recuerdos que tengo de mi infancia.

Como yo no asistí a dicho encuentro, pregunté los detalles, y me contó que la experiencia fue la siguiente: llegó durmiendo al Estadio, despertó a la media hora llorando y llamando a la Mamá, al rato se le pasó, y disfrutó del espectáculo, mi marido me decía que le llamaba la atención los cantos y gritos de las barras, que si miraba el partido y le decía “Mira Papá, el de amarillo tiene la pelota”, por el arquero, cuando cometían un foul gritaba “se cayó Papá” o “le pegó”, comió “Palomitash” con su infaltable botella de Gatorate, así que por lo visto lo disfrutó, lo triste de todo es que el partido lo perdió el equipo, por lo que mi Papá y mi marido salieron un poco decepcionados, pero bueno se rescata el buen momento que disfrutaron y pudieron compartir los tres, por lo que creo que se volverá a repetir más adelante, espero que esta vez sea con un triunfo.