Hace tanto tiempo que no escribo, la verdad de las cosas es que con dos niños el tiempo se me ha hecho escaso, pero también por flojera y comodidad tampoco me hago el espacio de escribir, pero hoy me quiero detener un momento y hacer un resumen de lo que hemos vivido desde la ultima vez que pase por acá.
De partida puedo contarles que mis hijos están hermosos, por lo menos así lo veo yo, Agustín ya esta en pre-kínder, sigue en su jardín y este mes de Mayo es la postulación a los colegios, tema que me asusta muchísimo, mi niño es bastante desconcentrado, por lo que no se cual será el resultado de su prueba de admisión, tengo pensado postularlo a dos colegios, ya esta inscrito en uno y ahora debo reunir los antecedentes para el otro. El pequeño Tomás ya tiene 6 meses y medio, le aparecieron sus primeros dientecitos, esta comiendo, se sienta solito y se quiere parar, esta balbuceando sus primeras palabras y sigue con lactancia materna combinada con un relleno cuando esta al cuidado de mi Mamá, como precaución toma Nutrilon HA (leche semi hidrolizada), para evitar cualquier problema se tomo como antecedente la alergia alimentaria que tuvo su hermano mayor (APLV alergia a la proteína de vaca) hasta el momento no ha presentado ningún inconveniente.
Como familia no tuvimos vacaciones en verano, por lo que los primeros días de abril nos fuimos en auto a Pucón, el viaje fue agotador, sobre todo para Tomás que se aburría fácilmente, teníamos que parar para descansar, por lo que le tomo odio a la silla de auto, ahora cada vez que lo subimos se coloca mañoso y hace berrinche, pero lo comprendo fueron hartas horas de viaje y las ultimas horas hasta yo iba cansada y un poquito idiota, sólo quería llegar a destino, pero la espera valió la pena fueron 5 días en que disfrutamos de las bondades del sur, de un cómodo hotel, descansamos, comimos rico, respiramos aire puro y por sobre todo disfrutamos a nuestra familia. Aún tengo en mi memoria el momento en que me detuve a escuchar la brisa del lago y respirar ese aire maravilloso, el tiempo se detuvo y di gracias por todas las cosas buenas que tengo, que sumando son muchas por lo que soy una agradecida de la vida y sobre todo soy inmensamente feliz con mis hombres. Por lo que ahora cada vez que tengo un problema recurro a ese instante y siento una paz tan grande, que olvido todo lo malo.
Después del viaje volví al trabajo, estuve casi 7 meses fuera de la oficina, hice uso del nuevo postnatal que se aprobó en Chile, del cual tengo mis aprensiones, es bueno en términos de tiempo, te permite estar con tu pequeño 5 meses y medio (y no seis, como pretende hacernos creer el gobierno), pero en términos económicos, en mi caso, no ha sido para nada beneficioso, me descontaron sueldo, reajuste y bonos que por derecho me corresponden al ser funcionaria pública, pero bueno peor es nada, he sabido de casos en donde ni siquiera se les ha pagado el sueldo a las mamás, por lo que es un tema que aún debe mejorar por el bien de todos nuestros niños. Con respecto a mi lado profesional me he sentido muy rara, no quiero estar en el trabajo, extraño demasiado a mis niños, me da pena levantarlos tan temprano y llevarlos donde mi mamá, sé que ella me los esta cuidando bien, pero siento que mi deber esta con ellos y no con el trabajo, daría lo que fuera por tener la opción de quedarme en mi casa, con Agustín no me pasó lo mismo, obviamente no quería dejarlo, pero sentía esas ganas de volver, esta vez es totalmente distinto, siento que los dos me necesitan más que nunca, por un lado Agustín entrará el próximo año al colegio, y me gustaría compartir esa etapa de la vida de mi hijo, con Tomás no quiero perderme ningún momento, quiero que sienta que su Mamá siempre estará ahí para él, pero es tan difícil.
